El concepto de infierno varía mucho según las diferentes religiones y culturas
pero para mí, el infierno, es una fuente de calor (horno, hornilla, freidora…)
en una cocina andaluza en los meses de verano.
Por muy cocinillas que uno sea, eso es inhumano.
Por eso, como ya te he venido adelantando en anteriores
entregas, estoy intentando que las recetas que te voy proponiendo en estos meses sean más rápidas y sencillas de
hacer, aún si cabe, que las que te he traído hasta el momento y, a ser posible,
que no requieran mucha cocción. No quiero que tengas ninguna excusa para no
meterte en la cocina y atreverte a hacerlas. Eso sí, para el otoño ya te estoy
empezando a preparar un buen abanico de recetas que te volverán a meter en los
fogones pero con las que, a cambio, te vas a deleitar. No obstante, por ahora
hace bochorno para tales aventuras cocineras.
Dicho lo cual, hoy he decidido traerte un postre muy
refrescante y digestivo: mousse de limón.